Si creíamos que Madonna tiene cierta preferencia por los hombres más jóvenes, esta novedad podría confirmarnos la teoría.
Parece que la relación con el modelo brasileño Jesús Luz se enfrió y ella, en lugar de bajonearse, salió a cenar y bailar con el coreógrafo de su gira “Sticky & Sweet”.
El afortunado es Brahim Rachiki, de 33 años. Según publica el diario New York Post, se los vio muy acaramelados en un local de moda de la ciudad de Nueva York.
El jueves pasado “entraron juntos y estuvieron agarrados de la mano en un área privada”.
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