La socialité Valmai Roche castigó de esa manera a sus hijas, porque creía que estaban conspirando contra ella.
La excéntrica mujer dejó la misma cantidad para el ex-marido, John Roche, un empresario dedicado a los bienes raíces y ex alcalde de la ciudad australiana de Adelaida.
En el testamento, hecho por Roche en 1987, dejó solamente "30 monedas de poco valor" para sus hijas, diciendo que la cantidad era "mucho dinero para Judas".
Roche también determinó que sus hijas y su ex marido, del que se divorció en 1983, fueran excluidos "de cualquier beneficio."
Sus hijas, Deborah Hamilton, Fiona y Shauna Roche Roche, creen que su madre estaba "delirando" cuando escribió el testamento y fueron a los tribunales alegando que deberían tener el derecho a la herencia.
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