Herald padece osteogénesis imperfecta, una enfermedad congénita, conocida como la enfermedad de los huesos de cristal. Los médicos le dijeron que no podría tener hijos y al quedar embarazada le aconsejaron directamente que abortara. Es que debido al tamaño de su torso el bebé aplastaría sus pulmones y su corazón.Pero Stacey siempre siguió adelante con sus embarazos. Este es el tercero y aunque conoce los riesgos no se arrepiente, pero confiesa que no es éste no es un bebé planeado. "Sólo queríamos dos chicos, de todas formas pensamos que los hijos son un regalo hermoso, y cuando veo a mis nenas veo vida y me lleno de amor", dice la pequeña mujer.
"Es un milagro que yo haya sobrevivido a los dos partos anteriores, ¿por qué no pensar que también puedo sobrevivir a este que se viene?"




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