Cansado de ver como otros aprovechan su trabajo y sacándole provecho se convierten en figuras aparentemente exitosas.
El Pavarotti se mostró irreverente con los comunicadores de Santiago a quienes tildó de "injustos y materialistas".
Sostiene que su trayectoria no ha sido resaltada por nadie y que todos los aportes que ha hecho no son tomados en cuenta por los cronistas y comentaristas de arte, en virtud de que no tiene fortuna como los demás.
Espera no morir sin al menos obtener un reconocimiento y lamentó que José El Calvo tenga tres premios Casandra como si fueran suyos, en torno a eso dijo: Ese señor no alcanzó otro premio igual después que yo me retiré de la banda.....Lo que significa que era yo quién tenía el triunfo"
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